martes, 16 de marzo de 2010

sex..........Sabina.....

Pasaba el día, dando órdenes a todo el mundo, y aunque había suavizado su caracter, su fama era de ...... arisca.... en general su forma de ir por la vida era manejando a los demás a su antojo, incluso manipulando, tenía una habilidad innata para manipular gente, pero le había salido caro..... y ya aspiraba a cambiar esas actitudes, y lo conseguía incluso, pero  su vida seguía siendo de llevar la batuta. trabajadores, clientes, hijos, todo lo manejaba........ era por eso, que a la hora de dejarse seducir,  era difícil encontrar un hombre que la convirtiera de gata arisca, a gatita ronroneante, que la consiguiera volver sumisa, con inteligencia...... y con fuerza.....con una mente capaz de doblegarla........
Sabina (en la insoportable levedad del ser, de kundera) expresaba bien esa necesidad:
"Fuerza: en la cama de uno de los muchos hoteles en los que hacían el amor, Sabina jugaba con los brazos de Franz:
- Es increible que tengas esos músculos.
Franz se alegró por el elogio. Se levantó de la cama, cogió una pesada silla de roble por la parte de abajo de la pata, junto al suelo, y la levantó lentamente...........Consiguió levantar el brazo con la pesada silla por encima de la cabeza y Sabina dijo:
Es agradable ver lo fuerte que eres.
Pero para sus adentros añadió.... Franz es fuerte, pero su fuerza se dirige sólo hacia fuera. Con respecto a las personas con las que vive, a las que quiere es débil. La debilidad de Franz se llama bondad. Franz nunca podría darle órdenes a Sabina. No le mandaría, como en tiempos hacia Tomás, que coloque un espejo en el suelo y ande encima de él desnuda. No es que le falte sensualidad, pero le falta fuerza para mandar. Hay cosas que sólo se pueden hacer con violencia. El amor físico es impensable sin violencia.
...¿¿Y por qué no utilizas nunca tu fuerza contra mi?? Por que amar significa renunciar a la fuerza - dijo Franz con suavidad.
Sabina se dió cuenta de dos cosas: en primer lugar, de que aquella frase era hermosa y cierta. En segundo lugar , de que al pronunciarla, Franz quedaba descalificado para su vida erótica.

La insoportable levedad del ser, Kundera.

2 comentarios:

  1. ¡Dos hostias le tenía que haber dado! Se hubiera quedado nueva. Pero claro... con esa forma de pensar... así nos va a Franz y a mi.

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  2. anda anda anda, que no os enterais de na

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